lunes, 27 de diciembre de 2010

A 50 AÑOS DE “BRASILIA”

Pasadas estas fiestas navideñas-esperando que hayan sido de su total gratitud y dicha por todo lo que representa-, y prontos a culminar el 2010; sería bueno terminarlo no sin antes hablar de un acontecimiento importante que sucedió en éste, el hecho del que escribo es justamente la celebración por conmemorar los 50 años de la Ciudad de Brasilia, Capital de Brasil, ocurrido el 21 de Abril.

Para hablar de la ciudad de Brasilia en toda su magnitud, tendríamos que empezar por nombrar a sus creadores, los cuales fueron: el encargado de la parte urbanística el arquitecto Lucio Costa, el paisaje estuvo a cargo del arquitecto Roberto Burle Marx y finalmente el que desarrolló la arquitectura que complementa a esta magnífica ciudad y que tan conocida la han hecho, es el mundialmente reconocido y galardonado arquitecto Oscar Niemeyer (Vigente aún con 103 años de edad).

Un poco de Historia
Brasilia fue construida con el fin de ser la nueva capital de Brasil, y situarse al interior del mismo; hasta entonces Brasil tenía dos ciudades capitales: Río de Janeiro y Salvador de Bahía ambas en la costa. La idea de construir una capital en el interior de Brasil era antigua, había sido propuesta en varias ocasiones desde finales del siglo XVII. Cuando fue elegido presidente de la República de Brasil en 1955, Juscelino Kubitschek hizo de la creación de la ciudad capital un símbolo para mejorar la imagen y expandir laindustria del país. En 1956 se nombró una comisión para determinar una ubicación exacta y crear un organismo ejecutivo para realizar los trabajos de construcción.

Kubitschek, fue un mandatario de orientación socialista, por ello formó un equipo de profesionales de su misma tendencia política. Así el grupo de creativos intentó desarrollar un modelo de ciudad "utópica" donde se pretendía eliminar las clases sociales; por esta razón, la ciudad también es conocida como Capital de la Esperanza, título otorgado por el escritor francés André Malraux.

El arquitecto Lúcio Costa ganó el concurso para el diseño de la nueva urbe y fue el principal urbanista de la ciudad; y Oscar Niemeyer, amigo cercano de Lúcio, fue el principal arquitecto de la mayoría de los edificios públicos.
 
“Ha nacido el gesto inicial, con que cualquiera localiza un lugar y toma posesión de él: dos ejes que se cruzan en ángulo recto, formando el signo de la cruz. Este signo se ha adaptado después a la topografía, a la inclinación natural del terreno y a la mejor orientación: los extremos de uno de los ejes se han curvado, formando un signo que puede inscribirse en el triángulo equilátero que limita la zona a urbanizar” Lúcio Costa.
 
“Me importa poco que se diga que soy el arquitecto de Brasilia siempre que se diga también que Lúcio Costa es su urbanista. Fue a él al que se le encomendó la tarea principal: proyectar la ciudad, las calles, las plazas, los volúmenes y los espacios libres. Mi colaboración fue más modesta y se limitó a los palacios de Gobierno.” 
Oscar Niemeyer

Cuando se proyectan los edificios de Brasilia, Niemeyer sigue los mismos criterios de Costa. Cada uno de ellos nace de un esbozo formal simplicísimo, incluso elemental, desarrollando con extremada parquedad las precisiones constructivas, cristalizando las aspiraciones nacionalistas de Kubitschek por el progreso y la mecanización de un país relativamente no industrializado. Contribuyendo a conformar la visión de Brasilia como”el despertar de un nuevo día para Brasil” (pareciera ser que BRASILIA, simboliza y sintetiza de cierta manera el lema de ese país «Ordem e Progresso» -Orden y Progreso-).
 
Las obras de construcción se iniciaron el 23 de octubre de 1956; y no fue hasta el 21 de abril de 1960, tras 41 meses de trabajo, que la ciudad fue inaugurada al quedar completada (sobre todo los edificios de los poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial). Posteriormente se concretaron otros edificios de la ciudad.
 
Entre los edificios más destacados en el paisaje urbano de Brasilia son aquellos situados alrededor de la Plaza de los Tres Poderes, el Palacio de Planalto o la Sala de Gobierno, el Congreso, con sus rascacielos gemelos flanqueados por la cúpula del edificio del Senado y por la invertida de la Cámara de Representantes, y finalmente la Corte Suprema. Otras construcciones de una calidad excepcional son la Explanada de los Ministros, la Catedral, el Panteón de Juscelino Kubitschek y el Teatro Nacional.
 

Otro dato que no hace más que confirmar el gran aporte que esta Ciudad significa para la arquitectura y urbanismo de la humanidad es que Brasilia es la única ciudad del mundo construida en el siglo XX a la cual se le ha adjudicado (en 1987) el rango de Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la UNESCO(Organismo de las Naciones Unidas).

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